Quetzalcóatl
Quetzalcóatl es una de las más importantes representaciones de la cultura mexica, a veces considerado la principal divinidad del panteón mexica, asociado con la vida, la luz, el color blanco, la fertilidad, la civilización y el conocimiento, muchas veces llamado Señor de los vientos. ¡A continuación brindaremos más detalles sobre esta extraordinaria deidad azteca, acompáñenos!
Etimología¹
El nombre de Quetzalcóatl deriva de dos palabras de origen náhuatl: por un lado quetzal, término utilizado para nombrar una especie de ave de hermoso plumaje que habita la selva centroamericana, y por el otro, cóatl, cuyo significado es «serpiente».
¿Quién es Quetzalcóatl ?²
Especial mención debemos hacer con una de las deidades más complejas y de mayor influencia del panteón mexica, y que más transformaciones profundas experimentó. La serpiente emplumada, Quetzalcóatl , era el dios del planeta Venus, y a la vez era la Estrella de la Mañana y Estrella de la Tarde. También se lo consideró a Quetzalcóatl como deidad del viento, inventor de la escritura y el calendario ritual, y para ellos un héroe cultural pues era identificado en los mitos con el rey-sacerdote de Tula. Por excelencia, era el rey de los sacerdotes.
Según la tradición azteca y su creencia de múltiples cataclismos, la humanidad actual no descendería de los supervivientes al cuarto cataclismo, sino gracias a Quetzalcóatl. La serpiente emplumada bajó al inframundo y robó los huesos de los muertos para rociarlos con su propia sangre y devolverlos a la vida.
Quetzalcóatl fue creado por la “Pareja Suprema” siendo uno de los dioses más antiguos. Era antagonista de su
hermano Tezcatlipoca en una oposición moral, pues Quetzalcóatl es el dios civilizador; un ser benéfico y bondadoso opuesto a Tezcatlipoca quien representa el mal, sin embargo, ambos colaboraron en la restauración de la bóveda celeste tras la caída del Cuarto Sol.
Vale destacar que en su forma humana (una de las tantas representaciones que podría asumir Quetzalcóatl) se lo figura con una barba símbolo de ancianidad, respeto y santidad. Y el hecho de ser el creador de los hombres que viven con el quinto sol, al recoger los huesos de los anteriores en el Mictlán, le concede una posición paternal pues también les enseñó a pulir y tejer.
Bibliografía
¹ – Mandrini, Raúl. América aborigen: De los primeros pobladores a la invasión europea. Buenos Aires. Siglo Veintiuno Editores,2013.
² -Porro Gutierrez, Jesús M. & Lucía Pérez Flores. La religión azteca. Facultad de Filosofía y Letras. Valladolid. 2018.
-Portilla, Miguel León. Ometeotl, El supremo dios dual, y Tezcatlipoca «Dios principal». 2009.
Historia – Universidad Nacional Tres de Febrero.
Instituto de Estudios Históricos – UNTREF.