Independencia de Colombia
La independencia de Colombia hace referencia al proceso político que provocó la conformación de la República de Colombia, hasta ese entonces perteneciente al Virreinato de Nueva Granada, y su emancipación con respecto a la Corona de España, hecho que se produjo entre 1810 y 1830. ¡A continuación, les brindaremos más información, acompáñennos!
Antecedentes ⁽¹⁾
En el marco de las Reformas Borbónicas, España tenía como aliado a la Francia de Napoleón, pero este en 1808 decidió tomar por la fuerza al reino español; de esta manera tienen lugar las Abdicaciones de Bayona (mayo de 1808), momento en el que Fernando VII es obligado a renunciar a la corona y es puesto prisionero junto con su padre Carlos IV. Es en este contexto donde se prefigura el colapso del Imperio español, ya que el vacío de poder generado en aquel momento tiene como respuesta la formación de Juntas de gobierno en todo el territorio español y americano. Para ocupar el lugar del rey cautivo, y en rechazo de los ocupantes extranjeros, los españoles se organizaron de esta manera. La soberanía pasó del rey a los representantes del pueblo en las juntas, comenzando así una fragmentación política en el imperio.
Con la ocupación francesa comienza la Guerra de Independencia Española, pero el avance francés sobre la resistencia fue notable y la Junta Suprema Central fue perdiendo cada vez más poder hasta su disolución y posterior reemplazo por un Consejo de Regencia.
Los sucesos en la península Ibérica ofrecieron un contexto favorable para la elite criolla del Virreinato de Nueva Granada, quienes buscaban escapar del monopolio comercial y los abusos de los funcionarios coloniales, como también conseguir la emancipación de la dominación española
Etapas de la Independencia de Colombia ⁽²⁾
Primera República de la Nueva Granada (1810-1816)
Este periodo también es conocido despectivamente como «Patria Boba«, ya que si bien marcó el inicio de la etapa independentista colombiana, por otro lado estuvo caracterizado por los enfrentamientos entre centralistas y federalistas.
A través de la escaramuza del Florero de Llorente (20 de Julio de 1810), los criollos de la ciudad de Santa Fe (Bogotá) se rebelaron e instauraron una Junta de Gobierno local, la cual arrestó al virrey vigente, Antonio Amar y Borbón. Vale destacar que con la deposición y el arresto del Virrey, el Virreinato dejaba de existir en cuanto lo teórico.
Una vez creada la Junta de Santa Fe, esta intentó imponer su agenda sobre el resto del territorio neogranadino, pero lo que generó fue el rechazo generalizado del resto de provincias y ciudades que conformaron sus propias juntas respectivamente. Las pretensiones centralista de la ex capital virreinal y las intenciones federalistas del resto del territorio conllevaron a la formación de dos entidades soberanos independientes hacia el año 1811:
- Las Provincias Unidas de Nueva Granada, cuya capital sería Tunja.
- El Estado Libre de Cundinamarca, con capital en Bogotá.
Ambos Estados continuaron luchando contra los realistas, pero también existieron combates entre las dos entidades bajo el marco de la Guerra civil entre centralistas y federalistas (1812-1815). Sin embargo, ante la caída de la Segunda República de Venezuela, Simón Bolívar emigra a Cartagena y se une al bando de las Provincias Unidas; hacia el 10 de Diciembre de 1814, el libertador toma Santa Fe y obliga a Cundinamarca a integrarse a las Provincias Unidas de Nueva Granada.
Reconquista española (1816-1819)
Fernando VII volvió al trono en 1814, pero se negó a obedecer la Constitución Liberal de 1812, dictada por las Cortes de Cádiz. El gobierno real derogó la Constitución, puso presos a los diputados liberales y comenzó una fuerte persecución política hacia aquellos que defendieron y profesaran la ideología del liberalismo.
Una vez que Fernando VII restauró su trono y expresó su posición conservadora, los realistas prepararon una expedición armada para recuperar los territorios americanos. Por ende, hacia 1814, la situación de los gobiernos revolucionarios hispanoamericanos no era la más propicia.
En 1815, desde la península se envió una expedición, de 60 barcos y 10 000 hombres, dirigida por el general Pablo Morillo con el fin de reconquistar los dominios en América. La contraofensiva fue letal y los patriotas sufrieron duras derrotas y, finalmente, los realistas tomaron Bogotá el 6 de mayo de 1816. Una vez restaurada la dominación por parte de la Corona española, Morillo impartió duras penas contra los revolucionarios y muchos de ellos fueron fusilados, entre ellos el presidente de las Provincias Unidas de Nueva Granada, Camilo Torres.
Campaña Libertadora (1819)
Como se mencionó anteriormente, entre 1815 y 1819 la Nueva Granada recibió el impacto de la reconquista por parte de la Corona española, haciéndose cargo de ella Pablo Morillo al instaurar el “régimen del terror”, situación de extrema violencia que conllevó a un recrudecimiento del proceso independentista neogranadino.
El 15 de febrero de 1819 se inició el congreso de Angostura en Venezuela, espacio en dónde se sentaron las bases para la formación de la Gran Colombia y se programó la campaña militar para liberar a Nueva Granada. Bolívar sostenía que la campaña debía realizarse, ya que el ejército realista no era lo suficientemente fuerte en aquella región, además contarían con el apoyo civil debido al creciente descontento ante el aumento de los impuestos y las terribles olas de ejecuciones.
Contando con el apoyo de Francisco de Paula Santander, Bolívar planeó y ejecutó una campaña a la cabeza de un ejército mixto de neogranadinos, venezolanos y un grupo de voluntarios europeos. Los patriotas cruzaron los llanos en épocas de lluvia y ascendieron por los Andes mediante caminos que alcanzaban hasta 4.000 metros de altura. Venciendo en el combate de Paya y finalizando el Paso de los Andes, los patriotas continuaron sus éxitos al imponerse ante los realistas en la Batalla del Pantano de Vargas. El resultado de esta contienda provocó el intento de retirada de los realistas, bajo el mando de Barreiro, hacia Bogotá y la ocupación de Tunja por parte de los independentistas.
Los libertadores pretendían evitar a toda costa el repliegue realista y desarrollaron la emboscada en cruce del Río Teatinos de la jurisdicción de Tunja, circunstancia conocida como Batalla de Boyacá, la cual finalizaría con una victoria patriota . Esto representó un duro revés para los realistas, ya que perdieron los principales territorios de Nueva Granada, al mismo tiempo que se afianzaba el camino para la formación de la Gran Colombia al permitir la entrada triunfal de los independentistas a Bogotá el 10 de Agosto de 1819.
Gran Colombia (1819-1830)
La unión de Venezuela y Nueva Granada fue ratificado por el Congreso de Cúcuta (1821), consolidándose así el proyecto de la Gran Colombia. Sin embargo, esta nueva entidad sufrió de una fuerte inestabilidad política producto del enfrentamiento entre «bolivaristas» (de tendencia centralista y autoritaria) y federalistas (proclives a las autonomías regionales y contrarios a la perdurabilidad de los cargos políticos). Finalmente, estas discrepancias condujeron a la disolución de la Gran Colombia y la formación de tres nuevos Estados independientes: Venezuela, Ecuador y Colombia.
Bibliografía
¹ -Bushnell, D. (1991). La independencia de América del sur española. En L. Bethell, Historia de América Latina 5: La independencia. (págs. 75-123). Barcelona: Aragó.
² -Kinder, Hermann; Hilgemann, Werner. Atlas Histórico Mundial II. Madrid, 2006.
-Martínez, J. (2014). De colonias a naciones: Iberoamérica y la construcción de los nuevos Estados. En L. Ágenles, Historia Contemporanea Universal: Del surgimiento del Estado contemporáneo a la Primera Guerra Mundial (págs. 139-160). Madrid: Alianza Editorial S.A.
Historia – Universidad Nacional Tres de Febrero.
Instituto de Estudios Históricos – UNTREF.