Guerras Púnicas (264 a.C – 146 a.C)

Cártago fue una ciudad antigua que se ubicaba al norte del continente africano, en las costas de la actual Túnez. Dicha localidad fue fundada por fenicios provenientes de Tiro que emigraron a esta zona hacia finales del siglo IX a.C. Después que Tiro cayó en poder de los asirios, Cartago empezó a crecer como una ciudad independiente y destacada.

Su desarrollo hizo que los cartagineses rivalizaran en poder con otras ciudades prominentes del mediterráneo, tales como Roma y Sicilia. Uno de los fuertes de esta ciudad era su actividad económica, la cual la habían extendido hacia amplias zonas del mar mediterráneo gracias a la habilidad que tenían de surcar los mares con embarcaciones modernas.

En medio del clima floreciente de esta ciudad, las ansias de dominio fueron también creciendo entre los gobernantes romanos, quienes vieron a Cartago como un rival directo. Sin embargo, quienes dieron el primer paso para provocar la guerra fueron los cartagineses, derivándose en tres enfrentamientos denominados Guerras Púnicas.

¿Quiénes participaron en las Guerras Púnicas?

En las guerras púnicas se enfrentaron los cartagineses contra los romanos, quienes para la época representaban las principales potencias de la parte norte y sur del área occidental del mar mediterráneo.

La batalla de Zama. Ilustración policromada de Cornelis Cort.
La batalla de Zama. Ilustración policromada de Cornelis Cort. Extraído de Academiaplay.

Cartago era una ciudad que funcionaba bajo un sistema de gobierno de monarquía y tiranía. Sin embargo, con el pasar de los años, en Cartago se estableció un sistema de gobierno completamente republicano, el cual fue la capital de todo el territorio que dominaron. Se desenvolvieron como habilidosos comerciantes, lo que les ayudó a progresar y obtener grandes riquezas.

Por su parte, Roma era una ciudad estado que mantenía dominio sobre el actual territorio de Italia. Aunque antes del comienzo de las Guerras Púnicas, los romanos no contaban con tanto dominio de tierras como en el caso de los cartagineses, sí contaba con un importante ejército preparado para las batallas, listo para conquistar nuevas tierras en sus ansias de poder.

¿Cuándo y donde tuvieron lugar las Guerras Púnicas?

Las Guerras Púnicas fue una serie de enfrentamientos que se presentaron entre los años 264 a.C. hasta el año 146 a.C. a lo largo de la zona central y el oeste del mar mediterráneo. El término ‘Púnico’ se deriva de la denominación étnica con la que los romanos se referían a los cartagineses, expresión que hacía alusión a los ancestros de este pueblo, a saber, los fenicios.

Las Guerras Púnicas se componen de tres etapas de varios enfrentamientos. Las primeras dos etapas tuvieron lugar durante el siglo III a.C. y el enfrentamiento final, durante el siglo II a.C. La primera guerra comenzó en la isla de Sicilia, la segunda se inició en la península de Hispania hasta llegar a la propia península Italiana y la tercera en la ciudad de Cartago.

Evolución de las posesiones cartaginesas durante las guerras púnicas.
Evolución de las posesiones cartaginesas en el transcurso de las guerras púnicas. Extraído de Wikipedia.

Causas de las Guerras Púnicas

Los cartagineses contaban con el control del comercio marítimo en gran parte del mar mediterráneo. Esto fue posible gracias a que eran hábiles constructores de naves marítimas impulsadas por remos. Su dominio se extendía en gran parte del norte de África, ocupando las costas de los actuales países de Libia, Túnez, Argelia y Marruecos. Además, tenían bajo su dominio las islas de Sicilia, Cerdeña y Córcega.

En medio del floreciente dominio de los cartagineses, los romanos seguían alimentando su deseo de convertirse en un imperio dominante, lo cual los impulsó a anexarse la Magna Grecia, un territorio colonizado por emigrantes procedentes de Grecia. La magna Grecia estaba compuesta por el sur de la península de Italia y la isla de Sicilia.

En vista del choque de intereses, tanto el dominio económico, como el dominio territorial, fueron el detonante para que se presentaran los enfrentamientos entre estas potencias que se encontraban en plena lucha por extenderse.

Desarrollo de las Guerras Púnicas

Aunque las Guerras Púnicas se conformaron por diversos enfrentamientos bélicos a lo largo del norte y sur del mediterráneo, estas guerras se dividen en tres etapas, las cuales comenzaron con acciones puntuales que dieron inicio a los enfrentamientos entre cartagineses y romanos. A continuación, destacaremos aspectos puntuales de la primera, segunda y tercera Guerra Púnica.

Etapas de las Guerras Púnicas.
Etapas de las Guerras Púnicas. Extraído de Pinterest.

Primera Guerra Púnica (264-241 a.C.)

Esta guerra comenzó entre poblaciones locales de la isla de Sicilia, dominada por los cartagineses. Los habitantes de Siracusa y Mesina entraron en conflicto, y en vista de las circunstancias, los habitantes de Mesina pidieron la ayuda del Senado Romano, quien respondió a la petición enviando tropas. Los romanos estaban en un territorio que no les pertenecía, lo cual enfureció a los cartagineses, en especial porque los habitantes de Mesina los habían traicionado al solicitar ayuda de Roma. Por esta razón, bajo la dirección de Amílcar Barca, decidieron apoyar a Siracusa en la batalla contra Mesina.

Esto trajo como resultado que una batalla entre pobladores locales de la isla de Sicilia se convirtiera en una guerra entre Roma y Cartago. Aunque la flota de los cartagineses era superior a la de los romanos, estos lograron copiar el modelo de sus embarcaciones y lograron superarlos en números. Esto desembocó en una derrota de la primera guerra por parte de Cartago, quienes perdieron el control sobre Sicilia y posteriormente el control sobre Cerdeña y Córcega.

Segunda Guerra Púnica (218-201 a.C.)

Esta guerra comenzó cuando Aníbal tomó la ciudad de Sagunto, provocando que Roma declarara la guerra a Cartago. En vista de que para ese momento Roma tenía un gran control sobre el mar mediterráneo, Aníbal decidió llevar la batalla hasta la península italiana en una incursión que realizó a través de los Alpes suizos. Su intención era llegar a Roma para atacarla y causar la ruina o la rendición de los romanos.

Al llegar a la península itálica desde el norte, Aníbal derrotó a todos los ejércitos romanos que enfrentó, sin embargo, nunca entró a Roma, quizás por temor a ser superado en número. En medio de este panorama, la lucha entre estas potencias también se desarrollaba en Hispania y Sicilia.

Aunque la república romana no había logrado sacar a las tropas de Aníbal de la península itálica, sí lograron invadir el territorio dominado por los cartagineses, hasta el punto de trasladar sus tropas hasta África, donde planeaban atacar la ciudad de Cartago. Estas circunstancias obligaron a Aníbal a regresar a Cartago para defenderla, donde fue derrotado en la Batalla de Zama por las tropas dirigidas por Escipión, produciéndose así el fin de Segunda Guerra Púnica.

Batalla de Zama según un grabado de Cornelis Cort , año 1567.
La Batalla de Zama según un grabado de Cornelis Cort (1567). Extraído de Wikipedia.

Tercera guerra Púnica (149-146 a.C.)

Luego de que los cartagineses recibieran fuertes exigencias provocativas por parte de Roma, decidieron alzarse. Sin embargo, aunque en un principio lograron repeler al ejército romano, Publio Cornelio en una segunda ofensiva, asedió la ciudad de Cartago durante tres años. Como resultado final, la ciudad fue saqueada, quemada y los sobrevivientes fueron vendidos como esclavos.

Vencedor de las Guerras Púnicas

Los romanos resultaron los vencedores de las Guerras Púnicas gracias a la sagacidad de su ejército, quien supo aprovechar los puntos a favor en medio de la invasión realizada por Aníbal en la península italiana. Luego de estas tres batallas, los cartagineses no volvieron a recuperarse, lo que se desembocó en el fortalecimiento de los romanos, lo cual formó parte de la base que les permitió convertirse en un imperio poderoso de gran dominio.

Consecuencias de las Guerras Púnicas

Las peores consecuencias de las Guerras Púnicas las recibieron los cartagineses. Luego de controlar los mares y gran parte del comercio de la zona, se habían consolidado como una potencia sobre el mediterráneo. Sin embargo, en vista de la astucia de los romanos, no pudieron sustentar las victorias obtenidas durante la Segunda Guerra Púnica. Finalmente, la ciudad de Cartago vio el fin de su historia cuando fue arrasada y quemada por el ejército dirigido por Publio Cornelio Escipión durante la Tercera Guerra Púnica.

  • ¿Te ha resultado útil este artículo?
  • SiNo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.