Anschluss (1938) – La anexión de Austria
Se conoce como Anschluss a la anexión de Austria por parte de Alemania. Este hecho tuvo lugar en marzo de 1938, de esta forma Adolf Hitler iniciaba la expansión del Tercer Reich por Europa, buscando formar un gran imperio alemán. Posteriormente llevaría adelante la invasión a Checoslovaquia y a Polonia, dando inicio a la Segunda Guerra Mundial.
En el siguiente artículo te contaremos el detalle de la anexión de Austria de 1938, conocida como Anschluss⁽¹⁾. ¡Acompáñanos!
Contexto de la Anschluss
La anexión de Austria por parte de Alemania se dio en el período de entreguerras, caracterizado por el ascenso del fascismo en Europa, particularmente protagonizado por la figura de Adolf Hitler quien estaba al mando del Tercer Reich. El líder nazi buscaba crear un potente imperio alemán, devolviéndole la gloria del pasado a un país que había quedado destrozado luego de la Primera Guerra Mundial.
Hitler llega al poder en 1933, pero desde hacia una década el nazismo planteaba la necesidad de crear una gran Alemania, incorporando a su territorio todos los lugares en donde vivan alemanes. Este fue el caso del su vecina, Austria, que había nacido luego de la disolución del Imperio Austro-Húngaro. Hitler veía en Austria una fuente de recursos para el rearme de su ejército, además su anexión sería el primer paso para la construcción de un gran imperio.
Lo central en este contexto fue la reacción del resto de las potencias europeas. Francia y Gran Bretaña no intercedieron en la anexión, por temor a causar una nueva guerra, mientras que Benito Mussolini desde Italia se alineó con Hitler (esto quedó demostrado en la participación conjunta que hicieron durante la Guerra Civil Española, en favor de Francisco Franco). Teniendo el camino libre, los nazis de Austria presionaron al gobierno austriaco, y finalmente Hitler movilizó a su ejército hasta la capital, Viena, asegurando la anexión.
Austria antes de la anexión
Los nazis se presentaron en las elecciones austriacas a comienzos de la década de 1930, pero sin lograr una victoria. Desde ese entonces tomaron como estrategia el terrorismo, organizando atentados contra los edificios públicos y contra sus opositores. Las cosas llegaron a puntos extremos, el 25 de julio de 1934 los nazis intentaron un golpe de estado en el que asesinaron al canciller Engelbert Dollfuss, quien tenía una ideología social cristiana y era cercano a Mussolini, aplicando políticas de tipo fascista en Austria, pero teniendo como enemigos a los nazis que querían tomar el poder. El golpe de estado fracasó, el ejército austriaco se mantuvo leal al gobierno.
De esta manera llega Kurt Schuschnigg al puesto de canciller, siguiendo la línea de Dollfuss, siendo contrario a los nazis. Mientras tanto, el apoyo de la población a los nazis iba en aumento, debemos destacar que Austria atravesaba una fuerte crisis económica (consecuencia de la Gran Depresión de 1929-1930). El malestar de la población austriaca fue beneficioso para los nazis, quienes encontraron gran apoyo entre la juventud.
Hitler enviaba recursos a los nazis en Austria, presionando de esta manera al gobierno. La situación era tal que una guerra civil podía estallar en cualquier momento, por lo que Schuschnigg decide reunirse con Hitler el 12 de febrero de 1938 (mientras los nazis seguían llevando adelante el terrorismo, dejando un saldo de 800 muertos entre 1934 y 1938). En dicha reunión Hitler le planteó sus condiciones, que apuntaban a lograr que los nazis tuvieran mayor participación en el gobierno austríaco, pero lo que seguiría sería una invasión directa a Austria.
El referéndum y la anexión de Austria
Schuschnigg decide llevar adelante un plebiscito a comienzos de marzo de 1938, en el que buscaba que la población vote a favor o en contra de la independencia de Austria. Esto enfureció a Hitler, lo que llevó a la anexión por la fuerza. Alemania siguió presionando al gobierno austriaco, exigiendo que el plebiscito no se lleve adelante y la renuncia de Schuschnigg. Los nazis austríacos salieron a las calles, causando un gran caos y tomando edificios públicos.
La presión fue sobre el presidente Wilhelm Miklas, quien recibió una última advertencia de Hitler el 10 de marzo. Fue así como el referéndum quedó sin efecto y Schuschnigg fue obligado a renunciar. En el lugar de canciller fue puesto un nazi, Arthur Seyss-Inquart. Pero la tensión siguió, los nazis siguieron tomando edificios públicos, controlando la capital, Viena. La invasión ya estaba planificada, los militares alemanes fueron recibidos sin resistencia el 12 de marzo, mientras que el presidente Miklas era arrestado. El 12 de marzo las tropas alemanas llegaban a la capital, la anexión era un hecho.
A pesar de romper el Tratado de Versalles con esta anexión, los alemanes no sufrieron sanciones de las demás potencias europeas. Este era el principio del expansionismo del Tercer Reich. Hitler llegó a la capital austriaca el 14 de marzo, siendo recibido por una multitud. Hitler llamó a un plebiscito para el 10 de abril, donde más del 90% de la población votó a favor (sin voto secreto y en una elección manipulada) de la anexión. De esta manera Austria dejó de ser independiente y pasó a formar parte de Alemania en calidad de provincia, dividida en siete distritos.
Consecuencia de la Anschluss
El gobierno nazi acabó con la independencia de Austria y aplicó las políticas de segregación racial de inmediato. Los judíos fueron perseguidos, al igual que cualquier opositor político. Unos 7000 mil judíos se suicidaron durante estos hechos.
Por otra parte, el expansionismo alemán encontraba impulso, poco después se anexionarían los Sudetes de Checoslovaquia, y en 1939 invadirían Polonia, dando inicio a la Segunda Guerra Mundial.
El 27 de abril de 1945, cuando la derrota nazi era un hecho, en Austria se volvió a instaurar un gobierno independiente bajo la vigilancia de los Aliados.
Bibliografía
¹ Eric Hobsbawm, Historia del siglo XX. Crítica, 2018 (1994).
Evans, Richard J., El III Reich en el poder, Barcelona, Península, 2007.
Grüneberger, Richard, Historia social del Tercer Reich, Barcelona, Ariel, 2007.
Bernecker, W. L. (2021). La Paz de Versalles y sus consecuencias: Europa en el periodo de entreguerras. La Gran Guerra de 1914-1918. De Europa a América Latina, 19.
El Anschluss: Hitler liquida la Paz de Versalles. En La Vanguardia.
Historia – Universidad de Buenos Aires.
Grupo de Historia Popular – Instituto de Historia Argentina y Americana «Dr. Emilio Ravignani».
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